29 jul 2011

ZAPATERO FACILITA EL TRABAJO A RUBALCABA PARA LAS GENERALES

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha decido adelantar las elecciones cuatro meses y serán definitivamente el próximo 20 de noviembre, fecha que ha suscitado cierto morbo a tratarse de la fecha en la que murió el dictador Francisco Franco. Tarde desde mi punto de vista, pero al final se ha producido el adelanto electoral que se exigía desde el principal partido de la oposición y desde amplios sectores de la sociedad. Desde el pasado mes de mayo, y tras la debacle socialista en las elecciones autonómicas y municipales, parecía oportuno convocar unas elecciones generales, más aún cuando el candidato socialista quedó definido semanas después. Sin embargo, Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba pensaron que más bajo no se podía caer en intención de voto y decidieron mantener el suspense de la convocatoria anticipada de elecciones en previsión de que empeorar era difícil y lo único que quedaba era mejorar algo y minimizar el daño que los socialistas podrían tener en las generales. Porque no cabe duda que la decisión tomada este viernes por Zapatero no parte de la propia voluntad del presidente del Gobierno, quien siempre mantuvo su intención de agotar la legislatura, sino que el candidato Rubalcaba tuvo que decir mucho en este paso dado por Zapatero. 

La bicefalia en la que estaba inmerso el partido, por una parte el presidente del Gobierno y secretario general del partido, Zapatero, y por otra el candidato a las próximas elecciones generales, Rubalcaba, estaba llevando a planteamientos contradictorios y en propuestas que no estaban dejando bien parado ni a uno ni a otro. Predicar una cosa desde el Gobierno y decir lo contrario como candidato no estaba resultado nada fácil. De celebrarse las elecciones en marzo, Rubalcaba tenía un camino difícil y largo por recorrer y eso había que acortarlo para no desgastarse. Si a esto le unimos el denominado caso ‘Faisán’ y las repercusiones que puede suponer ello en la imagen de Rubalcaba, exministro del Interior, está claro que la decisión no se hace tanto pensando en el bien de España y su delicada situación económica, sino más bien en beneficiar al candidato socialista. 

De hecho, y con toda la carga de escepticismo que queramos poner, la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), publicada esta misma semana, mostraba como el PSOE recortaba la distancia en intención de voto respecto al PP; además, lo que es más sorprendente, situaba a Rubalcaba por encima de Mariano Rajoy en valoración como un mejor futuro presidente. También coincide el anuncio de las elecciones con la publicación de los datos del segundo trimestre de la Encuesta de Población Activa (EPA) con 76.500 parados menos, aunque el desempleo continúa estando en el 20,85 por ciento, 4.833.700 personas. 

EstLas reformas previstas por el Ejecutivo y que había sido el arma utilizada por Zapatero para no adelantar las elecciones con la justificación de concluirlas, han quedado en agua de borraja. Estamos acostumbrados a que los políticos mientan sistemáticamente, pero lo peor es que lo haga el presidente del Gobierno, y no es la primera vez. Veremos si da tiempo de cerrar algunas de las reformas emprendidas por el Gobierno, pero llegarán muy justas y es posible que no salgan adelante. Hoy, el Fondo Monetario Internacional calificaba a nuestro gobierno de “relativamente optimista” en las previsiones económicas y recomendaba una subida del IVA y una disminución en el gasto de funcionarios. Deberá ser el nuevo gobierno que salga de las elecciones generales el que acometa la profundización de las reformas, y como parece que todos dan, incluso los socialistas, como ganadores al PP, tendrá que ser un gobierno liderado por Mariano Rajoy el que aplique posiblemente medidas impopulares.Y ese será el momento que tendrá el PSOE y Rubalcaba de sacar el mazo en la oposición y atacar al PP. Otra cosa es que tengan credibilidad en las críticas.

23 jul 2011

NADIE ESTÁ A SALVO DE LA IRRACIONALIDAD

Noruega es un país que ha visto alterada su tranquilidad y bienestar con un suceso que ha hecho estremecer no solo a sus ciudadanos, sino que la consternación ha trascendido sus fronteras. El primer atentado en la historia de este país nórdico ha dejado hasta el momento 92 víctimas mortales. Un coche bomba en Oslo, junto a las oficinas del Gobierno noruego, y poco después un tiroteo en una pequeña isla donde se iba a celebrar una reunión socialdemócrata. Los noruegos no podían imaginar que ellos serían también víctimas de la irracionalidad humana, de la irracionalidad de aquellos que utilizan la violencia para lograr fines políticos, de los que utilizan el nombre de la religión para cometer atentados terroristas o de sujetos que se dejan llevar por sus delirios. España sabe bien lo que es esa irracionalidad. Durante décadas hemos soportado los actos violentos de la banda terrorista ETA; sin embargo, el acto más atroz llevado a cabo en nuestro país fue el 11 de marzo de 2004, cuando diez explosiones casi simultáneas a primera hora de la mañana en cuatro trenes de Cercanías de Madrid causó la muerte a 191 personas y cerca de otras 2.000 resultaron heridas. Uno de los días más negros de la reciente historia de España. La sentencia de la Audiencia Nacional atribuyó la autoría a miembros de grupos terroristas yihadistas. El atentado en vísperas de unas elecciones generales condicionó el resultado de las mismas, ya que en un primer momento se relacionó con la intervención española en la guerra de Irak. Algunas lagunas en la investigación para esclarecer lo que realmente sucedió ese día desembocaron en un duro enfrentamiento político entre el PP y el PSOE.
El 11-S de 2001 ha sido una fecha que ha marcado la historia de este planeta. Fue la máxima expresión de hasta dónde el odio y la irracionalidad pueden llegar. Ese día una serie de atentados terroristas suicidas en Estados Unidos cometidos por la red terrorista Al Qaeda sembró el terror en todo el planeta. Las emblemáticas Torres Gemelas se venían abajo, el Pentágono también fue objetivo, cerca de 3.000 personas perdieron la vida y más de 6.000 resultaron heridas. Pero Estados Unidos también, y de manera quizá demasiado frecuente, sufre la tragedia por la acción de individuos que en su delirio personal son capaces de emprenderla a tiros con lo primero que se mueva. A comienzos de año un tiroteo en el Estado de Arizona contra una congresista estadounidense acabó con la vida de seis personas, entre ellos una niña y un juez. El presunto autor de los disparos fue un joven de 22 años de edad.
Reino Unido vivió también su día trágico. El 7 de julio de 2005 cuatro explosiones paralizaron el transporte público de la capital británica. En los ataques fallecieron 56 personas y cerca de 700 heridos. La organización terrorista Al Qaeda asumió la autoría de los atentados. El atentado más grave en territorio británico desde los 270 muertos del cometido en el vuelo 103 de la Pan Am que se estrelló en Lockerbie, en Escocia, tras el cual estaba Libia.
Brasil conoció este año su primera matanza escolar. Un ex alumno irrumpía en su antiguo colegio para matar a 12 estudiantes. El país quedó conmocionado por este suceso, el primero de estas características en el país sudamericano. También en un centro escolar en el sur de Alemania se produjo la matanza en 2009 de 17 estudiantes por parte de un joven de 17 años. En 2007, otro país nórdico, Finlandia, quedaba conmocionado por la muerte de siete estudiantes y la directora del centro a manos de un joven de 18 años. Un año más tarde, también en Finlandia, nueve jóvenes y un profesor fueron asesinados también en un centro escolar. A finales de 2009, en un centro comercial finlandés, un hombre de 43 años, que se suicidó, disparó a discreción matando a tres personas después de haber matado a su mujer en el domicilio de ambos.
Qué decir de la masacre acontecida en un colegio de la ciudad de Beslán, en Osetia del Norte, Rusia, con 370 muertos, de los cuales 170 eran niños, después de que un grupo de terroristas musulmanes, chechenos e ingusetios, asaltasen el colegio. También en Rusia, habituada a los atentados de los chechenos para exigir la independencia de su territorio, se produjo la muerte de 42 terroristas chechenos y más de 100 rehenes en un teatro moscovita tras la irrupción de las tropas rusas en el interior del edificio.
Lo más común para occidente es ver cómo los atentados indiscriminados se producen en países como Afganistán, Irak, Pakistán, incluso en la India, donde la ciudad de Bombay ha sido escenario en varias ocasiones de atentados que han dejado un importante número de víctimas. Pasan a ocupar la información diaria en los medios occidentales y dependiendo del número de muertos, ocupa más o menos relevancia informativa.
Todo indica que en Noruega estamos ante la locura de un sujeto, ya identificado, al que se le vincula con la extrema derecha. La investigación está abierta y se verá si se corresponde con la acción de un solo individuo o con la participación de más sujetos desde las posiciones más radicales y xenófobas que puedan existir. Lo que se pone de manifiesto es que la locura y la irracionalidad no tienen fronteras.  

20 jul 2011

EL EFECTO CAMPS

Entre la espada y la pared. Así se puede definir la situación de Francisco Camps dentro del PP en el día que tenía que acudir al juzgado para asumir su culpabilidad y pagar la multa establecida por la “causa de los trajes”. Aceptar la culpabilidad significaba asumir lo dicho hasta ahora como mentiras continuadas que dejarían marcado su futuro en la política, pero también un daño irreparable al partido y a su líder, Mariano Rajoy, quien apoyó, aunque con la boca pequeña, al presidente valenciano.
La otra salida era la dimisión, y así lo ha hecho. No ha aceptado ser culpable por algo que siente en su más profundo convencimiento que es falso. Pero entonces, por qué esperar tanto tiempo para llegar a este momento. Tanto tiempo de especulaciones que lo único que han hecho es erosionar su imagen y la del partido, pese a obtener mayoría absoluta en las últimas elecciones autonómicas en la Comunidad Valenciana. Erosionar, porque siempre queda la sombra de la duda. La defensa que está dispuesto a hacer de su caso desde fuera de la política, ya la podría haber realizado hace bastante tiempo. La cercanía de las elecciones generales es, sin duda, un elemento fundamental en este análisis. El PP no quiere que este tema enturbie su camino hacia el éxito electoral que puede llegar incluso este mismo año si se adelantan las elecciones generales. Busca evitar en la medida de lo posible que este asunto pueda ser utilizado por el PSOE para hacer sangre. Que lo hará de todas formas, pero su efecto quedará reducido. Y en eso consiste la dimisión de Camps. No enturbiar el camino al éxito del PP, no servir de tema recurrente en cada mitin socialista en la campaña de las próximas elecciones.
No obstante, varios implicados en esta causa han asumido la culpabilidad y pagarán la multa establecida: el exvicepresidente del Consell, Víctor Campos, y el exjefe de la Consellería de Turismo, Rafael Betoret. Ambos han acudido al juzgado con el escrito de conformidad bajo el brazo. En principio se consideran culpables de cohecho impropio. De no ser así, no se entendería cómo asumen una culpabilidad si se consideran absolutamente inocentes.
Lo cierto es que Camps sale del Gobierno valenciano en loor de multitud. Como una víctima propiciatoria. Posiblemente consiga el efecto de cohesionar más aún la sensibilidad de los votantes del PP y de aquellos indecisos que pueden ver este gesto como un golpe de autoridad dentro del partido y un gesto positivo del político valenciano. La justicia dirimirá si hubo cohecho impropio o no también en Francisco Camps, pero una vez más se pone en juego la decisión ética de apartarse de la vida política cuando un cargo público está imputado en una causa y no aferrarse al poder a pesar de lo que caiga. Son muchas las instituciones públicas donde encontramos imputados de diversa consideración y hay que ser exigentes como la política y los políticos. La regeneración moral de la vida pública pasa por asumir la responsabilidad y la honradez de saber dimitir en su momento, no cuando las circunstancias te ponen entre la espada y la pared.

19 jul 2011

MIGUEL ZEROLO: UN IMPUTADO EN EL SENADO


Curiosidades de la vida, pero el mismo día que el hasta hoy senador del PSOE y presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, entregaba su acta de parlamentario en el Senado por los acontecimientos de la pasada semana en Madrid, donde, presuntamente, agredió a un policía después de un altercado en un local de ocio de la capital, el Parlamento de Canarias nombraba a Miguel Zerolo, exalcalde de Santa Cruz de Tenerife, acusado por presunta prevaricación, malversación de fondos públicos y cohecho por su supuesta participación en una trama ilegal para obtener plusvalías de 120 millones de euros en la venta de los terrenos de la playa de Las Teresitas, senador por la Comunidad Autónoma. 

Y una vez más tenemos que tener en cuenta la presunción de inocencia para todos los imputados, aunque también es cierto que las evidencias de las imputaciones, la gravedad y la repercusión de los actos que han llevado a muchos políticos a ser imputados en diferentes causas varían en su trascendencia política y social. Está claro que ha habido imputaciones que no han llegado a ningún lugar, recuérdese el famoso viaje de José Manuel Soria, presidente del PP en Canarias y expresidente del Cabildo de Gran Canaria, a los países nórdicos. En este caso, Soria viajó presuntamente en el avión privado de Bjorn Lyng para pescar salmón en una supuesta gratificación por las actuaciones ralizadas por el Cabildo grancanario para facilitar a la empresa de Lyng la construcción de 3.500 camas en el sur de la Isla. Al final, la causa, conocida como ‘'caso Salmón', se archivó sin más. Aquí, la denuncia realizada por un periodista estaba cogida por los pelos. Aunque no hubiera delito, moralmente sería una cuestión a plantear este tipo de viajes de políticos con empresarios que pueden dar mucho que hablar y sembrar dudas en los ciudadanos. 

Miguel Zerolo fue imputado formalmente en 2007 por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias por prevaricación y malversación de fondos públicos en el denominado ‘caso Las Teresitas. La Intervención General de la Administración del Estado calificó en el informe las actuaciones como auténtico “pelotazo”. Toda una presunta trama montada de expropiación y revalorización de terrenos para obtener un beneficio de 120 millones de euros en muy poco tiempo. Además, en una investigación paralela surgida del propio ‘caso Las Teresitas’, la Policía Judicial ha descubierto que el partido CCN (Centro Canario) de Ignacio González, hoy nombrado portavoz adjunto del Grupo Nacionalista en el Parlamento de Canarias (CC-PNC-CCN), gastó 5,1 millones de euros en la campaña electoral de 2007, una cantidad cinco veces mayor a la permitida por la ley. Ignacio González también está imputado en este asunto por delito electoral.

Es decir, vamos a tener todos los canarios como representante en el Senado a un señor con una imputación lo suficientemente grave como para haber estado apartado de todo cargo público desde hace mucho tiempo y defender desde fuera de la política su inocencia. La política no debe ser una profesión, sino una vocación de servicio público. Muchos lo confunden, intencionadamente, y donde deben poner vocación sitúan profesión, y donde servicio al ciudadano, servirse del ciudadano. Ya dije cuando se constituyó el Parlamento de Canarias que una de las cuestiones que más me preocupaba era ver a Miguel Zerolo como diputado autonómico. Ahora lo tendremos como senador, y lo que ello puede suponer para la causa que se haya abierta que pasa ahora del Tribunal Superior de Justicia de Canarias al Tribunal Supremo. Los políticos continúan sin oír a los ciudadanos que piden una regeneración moral de la política canaria y de la española, pero eso parece que aún está lejos.  

15 jul 2011

LOS EXCESOS DE LOS POLÍTICOS: EL CASO DE CASIMIRO CURBELO

¿Creer a un político o creer un informe policial? Sinceramente, me quedo con la segunda opción. Teniendo en cuenta la facilidad y la práctica que tienen los políticos para esquivar la verdad, no resulta difícil que ante dos versiones tan opuestas como las del senador y presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, y la Policía sobre un altercando protagonizado por el político en cuestión y por su hijo, tienda más a depositar mi confianza en las fuerzas de seguridad que en la palabra del político, por lamentable que pueda parecer la poca fe que tengo en los políticos; se lo han ganado a pulso.  
Por delante queda que todas las generalizaciones conllevan a error. De acuerdo. Pero la balanza tiende de manera muy preocupante hacia la desconfianza en la clase política, y eso es algo que se refleja hasta en las encuestas.
Curbelo fue detenido el jueves por la Policía Nacional en Madrid por agredir supuestamente a varios agentes policiales tras un altercado en un lugar de ocio de la capital hacia las seis de la madrugada. El senador y presidente del Cabildo gomero fue traslado junto a su hijo, a una comisaría cercana. No viene al caso los datos de lo que podrían hacer o dejar de hacer Curbelo y su hijo en el local donde se originó todo el suceso, eso pertenece a la más estricta intimidad; ahora bien, cuando la conducta trasciende en un altercado público y cuando se pone por delante el cargo para amedrentar y coaccionar a las fuerzas del orden, tal y como se explicita en la narración de los hechos que hace la Policía, todo cambia. Los políticos suelen excederse con facilidad haciendo mal uso de su calidad de representante público y me parece que este es uno de esos casos. Lo primero que tiene que hacer un político es dar ejemplo a sus votantes y a toda la ciudadanía, va incluido en el oneroso sueldo que cobran y es lo mínimo que se les puede exigir. Además, respetar a las fuerzas de seguridad que, como funcionarios, realizan su trabajo y que no están para despropósitos montados por un político a altas horas de la noche, es un principio ético que un cargo público no se puede permitir el lujo de pasar por alto.
La comparecencia ante los medios de comunicación este viernes de Curbelo me  pareció patética. Daba la impresión de que no se creía lo que estaba diciendo y la explicación de lo sucedido. Peor aún cuando comienza a lanzar la tan usada cortina de humo de que el PP y los medios afines han elevado esta noticia a portada de la prensa nacional. Para rematar, evidentemente no dimitirá, solo serán los ciudadanos con su voto quienes lo hagan. Y es que si hay algo que le cueste a un político es reconocer que ha cometido un error, pedir disculpas y si la cuestión es de gravedad, a otra cosa mariposa. Pero esto último parece ser una utopía.

11 jul 2011

CUANDO FUIMOS CAMPEONES DEL MUNDO DE FÚTBOL

Nuestro deporte había conocido el éxito mundial en baloncesto, balonmano, tenis, ciclismo, waterpolo, deportes de motor (Fórmula 1, rally, motos), fútbol sala, con grandes atletas, y otros muchos deportes minoritarios que habían tenido su momento de gloria internacional. Sin embargo, para un país futbolero como el nuestro, siempre nos quedaba una espina clavada con la selección española que no había sido capaz, incluso en los momentos donde podía aspirar a algo importante, de materializar en éxito la tradición de este deporte en España y la cantidad de aficionados y de dinero que mueve. Con la victoria en la Eurocopa de Austria y Suiza en 2008 la historia cambió. En los cuartos de final contra Italia, en los penaltis, el pesimismo volvía a invadir nuestra voluntad, ya teníamos preparado aquello de “ya lo sabía”, “siempre la misma historia”, “estos italianos, al final quedan campeones”, “en los penaltis no ganamos ni a las chapas”, etc, etc. Pero no fue así, y la victoria en los penaltis fue como desatascar una tubería para que los nervios fluyeran con racionalidad y a partir de entonces dejasen de ejercer la presión que atenazaba históricamente a los jugadores.
Desde que tengo uso de razón solo había visto a la selección ir de tropiezo en tropiezo, fracaso tras fracaso, como el estrepitoso ridículo del Mundial que se organizó en 1982.  La mala imagen dada en nuestro mundial dio paso a la Eurocopa de Francia del 84. Con Francia y Alemania como grandes favoritas, ambas venían de ser semifinalista y finalista respectivamente en España’82, la selección había logrado clasificarse para la fase final en el mítico encuentro de los doce goles a Malta. Después de dejar eliminadas a Alemania y a Dinamarca, con un gran equipo por entonces, la desgracia llegaba en la final. Una falta lanzada por Platini se le escurría por debajo del cuerpo al gran portero Luis Miguel Arconada cuando ya había bloqueado el balón. Golpe decisivo en un partido muy igualado hasta entonces. España terminaba perdiendo (2-0).


Dos años después llegaba el Mundial México’86. El mejor momento de la llamada “quinta del buitre”, encabezada por Emilio Butragueño. Buen mundial de España que llegó a los cuartos de final y, merecedora de ser semifinalista, cayó en los penaltis ante Bélgica con un fallo de Eloy. La tristeza y la desolación volvían a estar presentes en los jugadores y aficionados.


Otro de los momentos amargos del fútbol español fue el Mundial de Estados Unidos en 1994. De nuevo los cuartos de final, y en esta ocasión Italia. Con su juego ramplón, los italianos llegaron a la final. De un partido en el que España debió ganar, siempre se recordará la imagen de Luis Enrique sangrando por la nariz después de un manotazo de Tassoti dentro del área que hubiera sido penalti, pero que ni el árbitro ni el juez de línea vieron o quisieron ver.
   



España volvía a tener una nueva posibilidad de hacer algo meritorio en una competición internacional. Fue en 1996, en la Eurocopa de Inglaterra, cuando en los cuartos de final, España barrió a la selección anfitriona pero no supo aprovechar sus oportunidades. Se llegaba una vez más a los penaltis y la historia se repetía, España caía 4-2.
En 2002, Mundial de Corea del Sur y Japón, España volvió a rozar las semifinales. La selección anfitriona fue nuestro rival en los cuartos de final. Los arbitrajes habían favorecido de manera descarada a los coreanos que también lo fueron en el partido contra España. Increíble, pero otra vez los penaltis nos dejaba sin las semifinales. Joaquín falló el penalti que le dio a los coreanos el paso a la siguiente ronda.
A partir de ahí, discretas participaciones hasta llegar a la Eurocopa de Austria y Suiza en 2008. Con la dirección de Luis Aragonés, la selección comenzó a destacar por hacer un fútbol vistoso a la vez que efectivo. El partido clave sin duda fue el de cuartos de final contra Italia. Era Italia y eran los penaltis. España superó la barrera de los cuartos y también la barrera psicológica del miedo al fracaso. Con un gran fútbol, España quedaba campeona de Europa tras ganar en la final a Alemania (1-0)
El gran momento llegaría el 11 de julio de 2010. España y Holanda jugaban la final del Mundial disputado por primera vez en el continente africano. Después de un comienzo de campeonato donde los fantasmas volvieron a resurgir con la derrota ante Suiza, la selección mostró su madurez, y la mejor generación de futbolistas que ha dado este país, ahora dirigidos por Vicente Del Bosque, lograron coronarse campeones del mundo con un gol de Iniesta en la prórroga.


A veces me planteo si tantos nervios, tanta angustia contraída, ese corazón que parece que se va a salir del cuerpo, vale la pena. Muchos dirán que es solo deporte, nada trascendente ocurra lo que ocurra, pero lo cierto es que todo un país vibró con ese triunfo. No es una cuestión patriótica, pero todos nos sentimos orgullosos de nuestra selección y de nuestra bandera. De lo contrario, cuándo hemos visto banderas nacionales colgadas en los balcones desde Canarias hasta el País Vasco. Está claro que el deporte une mucho más que la política, la cual tiende más a separarnos, a remarcar las diferencias, que a confluir en los rasgos que compartimos.

El placer de la victoria, eso es lo que sentí tras el partido. El cuerpo se le queda a uno con una irreductible sensación de euforia. Y sí, vale la pena el sufrimiento, es sentirte vivo, experimentar sensaciones como las que se puede experimentar en otros espectáculos, pero en este caso, más radicales.  

7 jul 2011

YA TENEMOS NUEVO EQUIPO DE GOBIERNO EN CANARIAS

El presidente del Gobierno de  Canarias, Paulino Rivero, ha anunciado este jueves, justo después de tomar posesión del cargo, el nuevo equipo de gobierno que sale del pacto firmado por Coalición Canaria (CC) y PSOE tras las elecciones del pasado 22 de mayo. Cinco consejerías nacionalistas y tres áreas para los socialistas. El número de consejerías se mantiene tal y como había terminado la pasada legislatura después de que el PP rompiese el pacto de gobierno. Ocho nombres entre los que no se encuentra de manera sorprendente el que siempre se ha considerado como pieza fundamental del pasado Ejecutivo de Paulino Rivero, José Miguel Ruano, a la espera de ver qué ubicación definitiva tendrá en el organigrama del Gobierno canario, si la tiene.  Otra ausencia, más que esperada por muchos, es la de la consejera de Educación, Milagros Luis Brito, que deja una consejería que además pasa ahora a ser controlada por el PSOE y por el líder de los socialistas canarios, José Miguel Pérez, que también será vicepresidente del Ejecutivo canario.
Hay nombres que se repiten, en algunos casos bastantes mediocres, y otros nuevos y con un alto nivel de cualificación. Tal es el caso de la nueva consejera de Empleo, Margarita Ramos, que viene avalada por una sólida trayectoria profesional y, dentro del derecho laboral, es considerada como una de las máximas expertas en las Islas. Por su parte, Domingo Berriel, José Ramón Hernández e Inés Rojas vienen del anterior Gobierno con luces y sombras en su gestión, en el caso de Berriel, con más sombras que luces. La Consejería de Economía y Hacienda queda en manos de un hombre de confianza de Rivero, Javier González Ortiz, que ya fuese viceconsejero en el anterior equipo de gobierno. La actual gerente del Hospital Universitario Materno Infantil en Las Palmas de Gran Canaria, Brígida Mendoza, será la consejera de Sanidad. Una consejería que vivió una legislatura convulsa con la gestión de Mercedes Roldós y en la que poco pudo hacer Fernando Bañolas cuando la sustituyó, dejando como última perla el conocido “caso hemodiálisis”. La situación de la sanidad canaria puede ir de la mano con la educación. La entrada de José Miguel Pérez para llevar la Consejería de Educación, Universidades y Sostenibilidad, es positiva desde el momento que ello supone la salida de Luis Brito al frente de dicha área. La situación de la educación en Canarias es alarmante, una mala gestión de la que ahora hay que recuperarse. No lo tiene fácil el nuevo consejero y vicepresidente del Gobierno canario. Educación ha sido siempre un departamento difícil, complejo, marcado por los constantes conflictos, por la pésima gestión de sus predecesores y ahora, también, por los recortes en el gasto público. Mucho trabajo y quebraderos de cabeza le esperan a Pérez. Por último, la experiencia de un político como Francisco Hernández Spínola al frente de la Consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad.
Destaca que la importancia de un sector como el turístico no tenga una consejería en esta legislatura. El motor de la economía canaria creo que debería tener un departamento al frente del cual estuviera una persona con capacidad profesional para coordinar las diferentes líneas de actuación dirigidas al sector. Asimismo, me extraña la mezcla de áreas en las consejerías que responden más a la estructuración política y de pacto que verdaderamente a una lógica disposición de las mismas.
En cualquier caso “alea jacta est”, la suerte está echada, ahora solo queda esperar a ver lo que hace este nuevo gobierno y valorar sus actuaciones. El primer paso es acometer un verdadero plan de austeridad dentro de los órganos de gobierno, con reducción de asesores, altos cargos, y la desaparición de las empresas y fundaciones públicas que ya estaban previstas suprimir desde la anterior legislatura. Solo así podremos comenzar creyendo en algo a este gobierno, y lo primero es dar ejemplo.

5 jul 2011

LA HISTORIA SE REPITE EN CANARIAS CUATRO AÑOS DESPUÉS

Hace cuatro años un pacto de gobierno entre Coalición Canaria (CC), segunda fuerza con más diputados por entonces, y Partido Popular (PP), tercera fuerza política en el Parlamento de Canarias, arrebataron la Presidencia del Gobierno de Canarias al socialista Juan Fernando López Aguilar que había ganado las elecciones autonómicas con una clara ventaja, pero insuficiente para poder gobernar en solitario. Las negociaciones para llegar a un acuerdo de gobernabilidad con nacionalistas y populares también fracasaron. Las duras críticas a CC de López Aguilar tachándolo del partido de la corrupción, así como la oposición natural al PP, hizo imposible gestar un acuerdo que sí lo alcanzaron los nacionalistas de Paulino Rivero y el PP de José Manuel Soria.
Cuatro años después, las tornas se han invertido. Aunque con igualdad de diputados, el PP obtuvo mayor número de votos en las pasadas elecciones del 22 de mayo en Canarias y como ocurriese en 2007, el partido más votado tampoco gobernará en las Islas. Coalición Canaria y PSOE se buscaban desde hacía tiempo. La buena relación de CC con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en Madrid facilitaba el camino del encuentro. El hecho de que con el actual sistema electoral canario las mayorías absolutas son casi imposibles, propina que los pactos sean el único camino para llegar a un gobierno estable en Canarias. La ruptura del pacto de gobierno de la pasada legislatura por parte del PP abría un escenario futuro de un gobierno CC-PSOE en el Archipiélago que este martes ha quedado patente con la reelección de Paulino Rivero como presidente del Gobierno de Canarias y con la entrada en el poder después de 18 años de oposición de los socialistas canarios que ya añoraban poder.
La legislatura que comienza no es nada fácil. Si difícil fue la que ha terminado, ahora se deberá profundizar en la austeridad en el gasto e intentar que las políticas sociales no se vean dañadas en exceso. Y eso requiere de una buena gestión, algo de lo que el anterior Gobierno de Canarias adoleció. Tanto la sanidad y, sobre todo, la educación, fueron dos áreas que se vieron afectadas en mayor manera por los recortes. El caso de la educación es sangrante. Un gobierno que repetía hasta la saciedad la necesidad de la formación y la preparación de nuestros jóvenes ha dejado la educación canaria en un estado lamentable, como hacía tiempo no lo estaba. La mala gestión de su consejera, Milagros Luis Brito, se ha ganado a pulso el rechazo unánime de profesores, sindicatos y también de muchos padres que veían perplejos cómo pasaban los meses y sus hijos no tenían profesores sustitutos para cubrir las bajas. Todo ello acompañado de los informes que una vez más dejaba la educación canaria en la cola del Estado, no sólo en el nivel académico de nuestros alumnos, sino en la relación inversión-resultados, lo que muestra una evidente mala gestión.
El índice de desempleo en Canarias es el más alto de todo el Estado, lo que ello supone de quiebra social y de parálisis en el progreso de la Comunidad. Cierto es que las acciones que Canarias puede hacer para generar empleo están sometidas al marco laboral del Estado y a las políticas económicas que adopte el Gobierno central. Aunque el Gobierno canario ha tomado medidas acertadas, no se comprende cómo en Madrid se ha apoyado algunas iniciativas y unos Presupuestos Generales del Estado que no parecían ser los más idóneos para los momentos de crisis por los que atraviesa el país. En la medida que CC ha apoyado buena parte de la política económica del Gobierno del Estado es corresponsable de la situación generada en el país, aunque se ufane en decir que Canarias es la primera Comunidad que comienza a salir de la crisis, algo que está por ver. Acabar con el 28 por ciento de paro, con una alta tasa de economía sumergida,  reactivar el sector de la construcción sin consumir más suelo, de atraer inversión a las Islas y posibilitar que nuestras empresas miren al continente africano, no va a ser tarea fácil. La recuperación real tardará años y podemos estar con la cabecita media fuera de la crisis un largo periodo estabilizando el paro, pero sin llegar a una reducción auténticamente significativa.
Coalición Canaria cuenta con la llave en Canarias. Mientras sea la primera o segunda fuerza más votada, tendrá la opción de pactar con el que quiera para formar gobierno. Teniendo en cuenta que no existen los condicionales sociales que puedan existir en otras comunidades autónomas (País Vasco por ejemplo), un pacto PP y PSOE es prácticamente imposible. La reforma del sistema electoral parece que finalmente puede acometerse en esta legislatura y eso puede influir en el reparto de escaños en el Parlamento de Canarias. Lo veremos.
Por último, hay dos cuestiones que me incomodan, siendo respetuosos con el lenguaje, de este Parlamento de Canarias. La presencia como diputado de CC del ex alcalde de Santa Cruz de Tenerife, Miguel Zerolo, imputado formalmente por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias de los delitos de prevaricación y malversación de fondos públicos por el llamado ‘caso de Las Teresitas’ y que la Intervención General de la Administración del Estado calificó de “pelotazo de libro” y, por otra parte, la presencia de un diputado del Partido de Independientes de Lanzarote (PIL), Fabián Martín, hijo menor de Dimas Martín, histórico líder de la formación lanzaroteña que está en prisión por corrupción y que continúa acudiendo a los Juzgados cada cierto tiempo ante las innumerables causas que tiene pendientes. El PIL durante años campó a sus anchas en Lanzarote y en los últimos años ha estado continuamente salpicado por presuntos casos de corrupción, PIL y corrupción llegaron a ser casi sinónimos. La presencia de Fabián Martín en la Cámara autonómica no me inspira confianza.

2 jul 2011

LA SGAE, BAJO SOSPECHA

Si hay una entidad que cuente mayoritariamente con el rechazo de los ciudadanos, no cabe duda que estamos ante la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE). A muchos no nos extraña que un hecho como el ocurrido este pasado viernes se haya producido. La falta de transparencia en la gestión de la SGAE se viene denunciando desde asociaciones que intentan frenar el poder que ha aglutinado la Sociedad en los últimos años. La Guardia Civil iniciaba la mañana del viernes con registros en la sede de la Sociedad, el Palacio de Longoria, emblemático edificio de Madrid. Su actual presidente, el canario Eduardo Bautista, y otras ocho personas de la cúpula directiva de la Sociedad han sido detenidas y esperan para pasar a disposición judicial. La investigación abierta tras una denuncia por apropiación indebida, estafa y fraude de subvenciones, deja bajo sospecha la gestión de una organización creada, supuestamente, para la defensa del autor, la supervivencia de los creadores y la salvaguarda de la cultura.
Desde la llegada de las nuevas tecnologías y, en concreto, la aparición de internet, la SGAE ha emprendido una especie de persecución, como si de policía cultural se tratase, contra todo aquello que pueda suponer una infracción de la ley de propiedad intelectual. La incapacidad de adaptación de la industria musical a los nuevos tiempos ha convertido a la SGAE en una máquina recaudatoria con la que compensar las “presuntas pérdidas” que conlleva el cambio de modelo, utilizando para ello métodos poco éticos y situaciones que bordean el absurdo. La grabación de bodas, bautizos, comuniones, o equipos de fútbol que no pueden poner su propio himno, son algunas de las situaciones más surrealistas en las que ha estado inmersa la SGAE. Por no hablar del canon digital, la norma que grava cualquier dispositivo electrónico en base al supuesto de que puede ser utilizado para almacenar o reproducir música pirateada, saltándose a la torera el principio de presunción de inocencia, ya que nos trata a todos como delincuentes.  
Lo que ahora se investiga, no obstante, no es que haya podido extralimitarse en sus acciones recaudatorias, sino en la gestión realizada de lo recaudado. Por delante queda, por supuesto, la presunción de inocencia; sí, la que la SGAE no aplica con el canon digital. La Justicia decidirá sobre la culpabilidad o no de los detenidos y de la gestión realizada al frente de la entidad, pero no quiero dejar pasar la oportunidad de dedicar algunas líneas al que debería ser el órgano fiscalizador de la Sociedad, el Ministerio de Cultura. La ministra Ángeles González Sinde, bonita racha lleva la señora, se ha convertido en la principal protectora de la SGAE y alguna responsabilidad debe tener el Ministerio si continuamente se le exige transparencia a la gestión de la SGAE y la máxima autoridad administrativa en Cultura no establece los mecanismos necesarios para ello. Esperemos que esto sea un golpe de efecto a la entidad y que de la soberbia y prepotencia que la ha caracterizado en los últimos años pase a convertirse en un órgano transparente, con medidas y acciones proporcionadas. La defensa de la cultura no se hace desde el afán recaudatorio, sino desde el trabajo, talento y creatividad de los artistas.